¿Qué viene después del Brexit?

Inglaterra votó a favor de abandonar la Unión Europea.  Alguien puede pensar que el autor de este artículo está equivocado y talvez me corrija: “no fue Inglaterra, fue el Reino Unido”. Pero si desagregamos la votación por cada país, notaremos que, Escocia, Gales e Irlanda del Norte votaron NO al Brexit.

Incluso la mayoría que votó apoyando la salida del Reino Unido de la Unión Europea, es una mayoría simple, no una mayoría calificada.  Abandonar la Unión Europea más que una decisión del pueblo británico es un tema que divide la opinión de los ingleses (que no de los británicos), lo cual no desvirtúa el hecho contundente y cumplido: esta es una decisión tomada.  El pueblo británico se ha manifestado y la decisión es irrevocable.  Gran Bretaña abandonará la Unión Europea.

¿Y ahora qué?, ¿Qué viene después del Brexit?

Por supuesto son las preguntas que rondan por la mente de millones de personas. El ciudadano de la calle, el ciudadano español que finalmente es el que más nos preocupa,  se ve expuesto a un maremágnum de información que lo desorienta, lo confunde pero sobre todo lo preocupa.

España y Francia son los  países que geográficamente se encuentran más cerca del Reino Unido y por supuesto, esta condición hace que la consecuencias del Brexit, buenas o malas, impacten en primera instancia y con mayor fuerza a estos países.  Son varios los temas puntuales que tienen que ver con situaciones domesticas que preocupan a los españoles y sobre los cuales procuraremos dar una luz al final de este artículo.

Antes que nada debemos entender que, aunque el gobierno británico tiene la obligación de “ejecutoriar” la decisión tomada en forma legítima en las urnas, llevar el resultado de este referéndum a la práctica es un proceso que puede resultar largo y dispendioso. El artículo 50 del tratado, que es el que habla de los protocolos para la salida de alguno de los miembros de la unión, establece que el proceso para abandonar la unión,  inicia con la notificación formal a Bruselas de tal deseo, por parte de la nación interesada.

De ahí la importancia que tiene la real “voluntad” que tengan los británicos para querer abandonar la Unión Europea. Veamos porque: El primer Ministro David Cameron, impulsa el referéndum sobre el Brexit, como una forma de “revalidar” la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea.  Es apenas natural que no esperaba un resultado negativo y por el contrario siempre creyó en obtener una victoria.

No fue así. La derrota lo obliga a cumplir el mandato del pueblo, pero también lo obliga a dimitir de su cargo, hecho este que desde ya, anuncia se dará en el mes de octubre.   De lo anterior podemos colegir que pocos días antes de su dimisión, en el mes de octubre enviará a Bruselas el comunicado formal mediante el cual el Reino Unido expresa su deseo de abandonar la Unión Europea.

Una vez, el parlamento Europeo reciba la comunicación de que estamos hablando, el proceso, sin dilaciones ni prorrogas llevará dos años, lo que se traduce en una salida real y efectiva de la Unión Europea a partir del año 2019.

En dos años y medio pasan muchas cosas. La política es cambiante y dinámica y lo cierto es que, a la luz de los hechos acaecidos una semana después del referéndum sobre el Brexit, podemos entender que son más los “arrepentidos” de haber votado por el NO, que los que aún defienden hoy en día la salida de la Unión Europea, entre ellos el exalcalde de Londres Boris Johnson, quien en declaraciones hechas minutos antes de escribir esta nota, dejo claro que no se presentará como candidato para suceder al Primer Ministro Cameron.

Lo cierto es que el sucesor de Cameron no la tiene fácil. Enfrentará una difícil  disyuntiva. Tendrá que impulsar el proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea, probablemente sin tener la convicción de que esta sea el mejor camino para esta nación, con la oposición manifiesta de tres de los cuatro estados que conforma el Reino y con la creciente oposición popular de los ciudadanos ingleses, quienes paradójicamente una semana después piensan contrario a lo que votaron.

Y es que las consecuencias de que los resultados de la votación sobre el Brexit no hayan registrado una mayoría amplia y suficiente son muchas. La primera de ellas será el resurgimiento de movimientos separatistas en los países miembros del Reino que claramente votaron en contra del Brexit, tema especialmente sensible en Irlanda en donde aún no termina el proceso de cicatrización de las heridas dejadas por el conflicto independentista.

Y es que para Irlanda, dejando de lado las consideraciones históricas y religiosas, el tema resulta especialmente sensible. EUROSTAT, que es la Oficina de Estadísticas de la Unión Europea, en sus informes con respecto al crecimiento económico de los países miembros para el año 2015, nos dice que el crecimiento de Irlanda del Norte fue de 7.8% del PIB, con respecto a las cifras del año anterior, lo que la consolida como la economía de la unión con mayor crecimiento en el año.

¿Qué podemos esperar durante los próximos dos años?

Es muy poco probable que, después de las declaraciones de Johnson, algún político enarbole la bandera del Brexit, con lo cual el nuevo Primer Ministro tendrá que ejecutar la decisión del pueblo aún en contra de sus posiciones.

Es probable que, el sucesor de David Cameron, avance con lentitud en el camino que lleve al Reino Unido a abandonar la Unión Europea. Recordemos que, como lo hemos anotado, el proceso SIN retrasos ni prorrogas llevará dos años.  Si no existe voluntad política, los tiempos son impredecibles.

A la par, el teórico sucesor de Cameron tratará de encontrar una solución a este entuerto antes de que sea en verdad irreversible.  Tendrá que convencer a sus socios en el Reino Unido, especialmente Escocia e Irlanda de que trabajará y hará esfuerzos en ese sentido, pero para ello necesita la unión y la colaboración de sus socios.

Sobre el porqué se llegó a esta situación se han escrito y se escribirán ríos de tinta. Lo cierto es que, más allá de documentar el hecho histórico, estas consideraciones no tienen ya mayor utilidad. Lo que si resulta útil en este momento, y sobre todo para los ciudadanos españoles es pensar en las consecuencias que el Brexit tendrá en nuestro acontecer diario y la forma de disminuir el impacto de las mismas.

¿Necesitaremos Visa para visitar el Reino Unido? Talvez no necesitemos Visa pero seguramente si el Pasaporte y por su puesto permisos para trabajar y para residir por periodos de tiempo prolongados.   Todo dependerá por supuesto de la capacidad de negociación entre los dos estados a la luz de las nuevas condiciones.

¿Será más costoso el servicio telefónico al Reino Unido? Si. Y no solo llamar a Inglaterra será más costoso sino que también las comprar on line, tendrán costes adicionales. Recordemos que en 2017 la Unión Europea eliminará el cargo por roaming entre los países miembros de la unión. Así mismo, los costes de correos y transportes de mercaderías se incrementarán.

¿Qué pasa con las Becas Erasmus? Seguirán iguales por dos o tres años. Después serán historia. Así es que aprovecharlas en tanto se pueda.

Por lo pronto es prudente esperar que se decanten lo hechos y hacer un análisis más juicioso en un par de meses. Veremos qué pasa entre tanto y confrontaremos con lo que vaticinamos hoy.  Hasta entonces.